Lo que está sucediendo ahora mismo en Madrid es una cosa, que a día de hoy, me parece un sin sentido de dimensiones épicas. Van a vetar el skateboarding en toda la ciudad.
La idea de prohibir una actividad lúdica en la totalidad de las calles y plazas de la ciudad me parece totalmente fuera de lugar y algo realmente ridículo triste.
Partimos de la base de que estamos hablando de la calle; la puta calle. Que si no estuviera eso asfaltado sería campo, es decir, espacio natural... siendo esto lo único que nos pertenece como animales que somos: el outside.
El poder salir a la puta calle a darme un paseo con el skate me da la vida al igual que a mi vecino se la da poder irse a Collserola a darse una puta caminata cada jueves. Lo mismo pasa con ir a la puta montaña a esquiar, si quieres ir por fuera de pistas, do it, la montaña es de todos y nadie te va a venir a prohibir una mierda. Darse un paseo por el Retiro es la polla y a pesar de que las bicis que pasan por ahí sean un puto coñazo, no voy a quejarme ni a pedir que prohiban nada.
Madrid da un paso atrás en muchos aspectos. La comunidad skater de la ciudad consiguió cierto consenso no escrito que permitía patinar en casi todos lados, con más o menos tranquilidad y altercados; y todo esto se va al garete porque la nueva Ordenanza de Movilidad Sostenible cataloga el skate de uso deportivo, lo que no permite su uso fuera de las instalaciones destinadas para ello, lo que significa que no se puede o queda prohibido su uso en las calles, plazas y carreteras.
No me extraña nada que la gente de Madrid se haya movilizado para mostrar su descontento y repulsa a esta modificación de la Ordenanza. Se quieren hace oír y por eso convocan a todos los skaters y ciudadanos de a pie con dos dedos de frente en la Plaza Cibeles el próximo 22 de Febrero. Aquí os dejo el cartel con los detalles.
GK!
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